Una experiencia increíble en medio del bosque! Nos despertamos con los sonidos de los pájaros y los monos por la mañana. El personal encantador, especialmente Jessie de recepción y Angel del bar. Ambos educados, amables y siempre sonrientes. La habitación era muy acogedora, con una cama super cómoda, perfecta para pasar unas noches románticas. El desayuno era delicioso, con fruta fresca, café local y platos típicos. El acceso a la playa privada y la ubicación entre Manzanillo y Puerto Viejo lo hacen perfecto para explorar la zona. Definitivamente volveríamos a este encantador hotel.

Imposible encontrar algo negativo. 🌟

Si estás buscando una ubicación increíble en el Caribe real, rodeado de selva y animales, este lugar es perfecto para ti. Podrás disfrutar de una hermosa playa prácticamente privada, con hamacas y zonas para relajarte. Además, podrás experimentar el sonido de la selva mientras duermes, lo cual es una experiencia inolvidable. Aunque hay algunos inconvenientes, como la falta de agua en las habitaciones, las instalaciones son estupendas y el restaurante ofrece comida deliciosa. También puedes disfrutar de un desayuno incluido, que aunque no es extraordinario, es aceptable.

El servicio al cliente deja mucho que desear, debido a la falta de amabilidad y atención por parte del personal encargado.

Pasamos unos días relajantes en este hermoso hotel frente a la playa. Las habitaciones eran amplias y cómodas, y me encantó cómo el hotel se mimetizaba con la naturaleza. Pude disfrutar de la playa, que aunque tenía oleaje fuerte, se podía nadar a pocos metros de la entrada. El desayuno estuvo delicioso y muy completo. Además, la ubicación en medio de la jungla nos permitió ver una gran variedad de animales como monos aulladores, mariposas y lagartos. El personal fue amable y servicial durante toda nuestra estancia. Sin duda recomiendo este hotel, es total.

Recomiendo este hotel, es total.

Tuve una experiencia increíble en un hermoso resort en la selva. Me encantó la sensación de estar en contacto directo con la naturaleza gracias a las cómodas cabañas de diseño "open space". El restaurante y el desayuno fueron deliciosos, y el personal fue muy amable y atento. Además, la ubicación del resort cerca de la playa fue muy conveniente para hacer caminatas y disfrutar de la hermosa vista.

Nos encantó la ubicación del hotel, rodeado de naturaleza exuberante y con acceso directo a la playa de Manzanillo. La habitación era espaciosa y hermosa, con techos altos y mosquiteras que permitían escuchar los sonidos de la fauna. Además, el personal fue muy amable y servicial en todo momento. También disfrutamos de las hamacas y camas disponibles en la playa para relajarnos.

Nos encontramos con cucarachas vivas en nuestra cama, lo cual fue decepcionante.

Qué desilusión! Con todas mis ganas de disfrutar de unas vacaciones en medio de la naturaleza, me encontré con una total falta de cuidado y mantenimiento en las instalaciones. Además, el personal, aunque amable, demostró una falta de profesionalismo evidente. Las fotos en la página web no reflejan la realidad actual del lugar. Por si fuera poco, a pesar de haber llamado en varias ocasiones para comentar detalles especiales de nuestra estadía, al llegar a la recepción no tenían constancia de ello. La falta de coordinación entre la central telefónica y la recepción es claramente un problema.

Debo rescatar que el tipo de alojamiento en cabañas en medio de la selva, con un concepto de "open space" que permite el contacto directo con la naturaleza, es interesante. Además, la ubicación en medio de la jungla es un punto a favor, aunque puede resultar un poco abrumador constantemente escuchar los sonidos de los animales día y noche.

El resort cuenta con una población de monos aulladores muy grande, los cuales se pueden escuchar o ver desde la cama por la mañana. Además, hay una gran cantidad de mariposas Azul Morpho y coloridas aves que le dan un ambiente único al lugar.

Mosquiteras rotas.

La ubicación y las instalaciones son impresionantes. El acceso a la playa es excelente y el desayuno es delicioso. Las cabañas son hermosas y te permiten estar inmerso en la naturaleza. Nos encantó la experiencia.

La playa es maravillosa, casi privada y perfecta para relajarse. Además, las habitaciones en medio de la selva ofrecen una experiencia única, al estar rodeadas de sonidos de animales e insectos.

El servicio al cliente dejó mucho que desear, con una atención poco amable y falta de respuesta a los problemas con el agua en las habitaciones. noté falta de señalización en los senderos resbaladizos y algunos problemas de mantenimiento en las habitaciones.

Siempre vuelvo a este hotel porque la primera vez me dieron una botella de agua por la noche. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis, estacionamiento gratuito, transporte al aeropuerto, sala de ocio/TV, lavandería, check-in/out VIP. Volveré para una escapada romántica.

La habitación tenía todo lo que necesitaba para mi estadía en Almonds And Corals Jungle Resort. Las lámparas de mesa eléctricas, el ventilador y las camas eran muy cómodas. Me encantó relajarme en la hamaca y disfrutar de la vista a la selva. Además, el baño tenía secador de pelo y agua caliente, ¡perfecto para después de un día de aventuras en la naturaleza!

Aunque la habitación era encantadora, no me gustó tanto el mini-bar. Personalmente, preferiría tener espacio en la nevera para guardar mis propias bebidas y alimentos.

La ubicación del hotel, en medio del bosque, nos brindó una experiencia única. Dormir con los sonidos de la naturaleza fue maravilloso. Además, la salida a la playa fue muy conveniente y pudimos disfrutar de hermosas caminatas. El personal del bar, especialmente Cesar y Tamara, fue ameno y nos hizo sentir bienvenidos. El desayuno fue excelente y disfrutamos mucho del lugar.

De verdad no hay nada que no nos haya gustado.

El alojamiento en Almonds And Corals Jungle Resort fue estupendo. El bungalow era precioso y tenía todo lo necesario, incluida una hamaca para relajarse. Las instalaciones del restaurante y el acceso a la playa eran excelentes. El personal fue amable y atento, incluso organizaron una actividad con un guía que fue muy exitosa. Sin duda, una estancia 100% recomendable.

Todo fue maravilloso.

Pasamos unos días maravillosos en un lugar para romper paradigmas. El entorno natural es tranquilo y fresco, sin necesidad de sistemas climatizados. Las habitaciones son limpias y acordes con el entorno. La comida en el restaurante cumplió mis expectativas, especialmente el pollo en la cena y el almuerzo. Los senderos son agradables, especialmente por las luces que crean un ambiente romántico. Además, en la playa, tienen hamacas y camas para descansar. Me encantó el concepto de integración con el medio ambiente y el hecho de que las pajillas del restaurante sean naturales y biodegradables.

Encontré algunas deficiencias en el hotel. No me informaron sobre la necesidad de traer repelente de insectos, lo cual fue necesario durante mi estancia en el restaurante.